ABC
16/04/2009
16/04/2009
La sociedad Expoagua, controlada por el Gobierno central y participada por el Gobierno aragonés y el Ayuntamiento de Zaragoza, no va a abaratar el precio al que tiene a la venta, desde hace meses, los terrenos de la Expo de 2008 que se van a reconvertir en parque empresarial. Las ventas están frenadas por la crisis económica, pero la sociedad estatal asegura que es «innegociable» el precio. Lo dijo ayer el presidente de Expoagua, Roque Gistau, tras firmar con el Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) de Aragón y Soria un convenio para intentar reanimar las ventas de suelo en ese futuro parque empresarial.
En un principio, la comercialización de esos espacios las adjudicó Expoagua a dos grandes firmas, King Sturge y Jones Lang Lasalle. Pero la sociedad pública les rescindió el contrato, porque las ventas no avanzaban.
Ahora se busca el apoyo de los API, pero el precio de venta sigue siendo el mismo que el que se fijó antes de que la crisis económica cayera a plomo. Es el mismo que se marcó meses antes de que abriera sus puertas la Expo, cuando la coyuntura económica era muy diferente. Pero la sociedad estatal dice que ya era un precio muy ventajoso, así que no ha lugar rebajarlo. Asciende a una media de 2.400 euros el metro cuadrado.
Coste de 200 millones
Entre tanto, las ventas siguen frenadas. Hasta ahora está comprometida la venta de aproximadamente la mitad de los 165.000 metros cuadrados de oficinas que compondrán el futuro parque empresarial. Pero, de esa mitad, la mayor parte son espacios que se ha comprometido a comprar el Gobierno aragonés, uno de los tres socios de Expoagua. Esta sociedad estatal tiene que desembolsar unos 200 millones de euros para reconvertir los pabellones de la Expo en el nuevo parque empresarial. En dos años estarán listos los edificios para recibir a las primeras entidades que quieran ocuparlos. La incógnita es cuántos años tendrán que pasar hasta que todo esté vendido.
De los menos de 90.000 metros cuadrados para los que ya hay compradores, más de 40.000 se ha comprometido a adquirirlos el Gobierno aragonés. Y, del resto, buena parte los han reservado empresas estatales, exactamente la Agencia EFE y Radiotelevisión Española (RTVE). Al margen de ellos, hasta el momento sólo hay tres empresas privadas que han reservado suelo -Grupo Jorge, la aseguradora DKV y la empresa de formación Máster-D-, aunque hay contactos abiertos con más firmas.
Expoagua mira a las pymes
Entre tanto, la patronal Cepyme-Aragón ha criticado el lento ritmo al que avanza el proyecto de parque empresarial y pide una implicación más ágil de las instituciones. Así lo indica en el último número de «Estrategia», la revista de la patronal aragonesa de la pequeña y mediana empresa.
Y eso que, ahora, lo que busca precisamente Expoagua son pymes interesadas en adquirir espacios de ese futuro parque empresarial. La sociedad estatal admite que son escasas las posibilidades de encontrar compradores de grandes superficies, así que habrá que apostar por parcelar. Por eso, Expoagua centra ahora sus esperanzas en las pequeñas y medianas empresas. Se podrán comprar oficinas de una superficie mínima de 100 metros cuadrados.
En un principio, la comercialización de esos espacios las adjudicó Expoagua a dos grandes firmas, King Sturge y Jones Lang Lasalle. Pero la sociedad pública les rescindió el contrato, porque las ventas no avanzaban.
Ahora se busca el apoyo de los API, pero el precio de venta sigue siendo el mismo que el que se fijó antes de que la crisis económica cayera a plomo. Es el mismo que se marcó meses antes de que abriera sus puertas la Expo, cuando la coyuntura económica era muy diferente. Pero la sociedad estatal dice que ya era un precio muy ventajoso, así que no ha lugar rebajarlo. Asciende a una media de 2.400 euros el metro cuadrado.
Coste de 200 millones
Entre tanto, las ventas siguen frenadas. Hasta ahora está comprometida la venta de aproximadamente la mitad de los 165.000 metros cuadrados de oficinas que compondrán el futuro parque empresarial. Pero, de esa mitad, la mayor parte son espacios que se ha comprometido a comprar el Gobierno aragonés, uno de los tres socios de Expoagua. Esta sociedad estatal tiene que desembolsar unos 200 millones de euros para reconvertir los pabellones de la Expo en el nuevo parque empresarial. En dos años estarán listos los edificios para recibir a las primeras entidades que quieran ocuparlos. La incógnita es cuántos años tendrán que pasar hasta que todo esté vendido.
De los menos de 90.000 metros cuadrados para los que ya hay compradores, más de 40.000 se ha comprometido a adquirirlos el Gobierno aragonés. Y, del resto, buena parte los han reservado empresas estatales, exactamente la Agencia EFE y Radiotelevisión Española (RTVE). Al margen de ellos, hasta el momento sólo hay tres empresas privadas que han reservado suelo -Grupo Jorge, la aseguradora DKV y la empresa de formación Máster-D-, aunque hay contactos abiertos con más firmas.
Expoagua mira a las pymes
Entre tanto, la patronal Cepyme-Aragón ha criticado el lento ritmo al que avanza el proyecto de parque empresarial y pide una implicación más ágil de las instituciones. Así lo indica en el último número de «Estrategia», la revista de la patronal aragonesa de la pequeña y mediana empresa.
Y eso que, ahora, lo que busca precisamente Expoagua son pymes interesadas en adquirir espacios de ese futuro parque empresarial. La sociedad estatal admite que son escasas las posibilidades de encontrar compradores de grandes superficies, así que habrá que apostar por parcelar. Por eso, Expoagua centra ahora sus esperanzas en las pequeñas y medianas empresas. Se podrán comprar oficinas de una superficie mínima de 100 metros cuadrados.
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