27/03/2010
Los programas, que cuentan con 14 millones más, llegarán a 80.000 personas. CCOO no pudo incluir un contrato que vinculaba la formación a un puesto indefinido.
La ecuación era tan sencilla que no podía resolverse de otra forma: a (muchos) más parados, más dinero para políticas destinadas a reactivar el mercado de trabajo. El Gobierno de Aragón, en colaboración con los sindicatos y las organizaciones empresariales, va a impulsar este año planes de formación y empleo por valor de 106 millones de euros, casi catorce más que en el 2009. El objetivo, según dijo la directora gerente del Inaem, Ana Bermúdez, es "paliar" las consecuencias de la crisis y "apoyar" a trabajadores y compañías para conseguir un capital humano "más cualificado" y un tejido empresarial "más competitivo". Las diferentes actuaciones que se pondrán en marcha podrían beneficiar en su conjunto a más de 80.000 aragoneses.
Con todo, la clave ahora es saber cuántos empleos lograrán crear estos programas, algo "muy difícil de cuantificar", según reconoció la propia Bermúdez. No obstante, desde el Inaem estiman que el 50% de los "alumnos" que realizan algún curso de formación encuentra empleo. Una cifra nada despreciable teniendo en cuenta que en 2009 pasaron por las aulas 47.000 personas (aunque no todas estaban en paro).
La directora del Inaem, que presentó el plan de empleo en la sede del Ejecutivo autonómico, estuvo acompañada por José María García, de la CREA, Rafael Zapatero, de Cepyme Aragón, Raúl Machín, de UGT, y Antonio Carvajal, de CCOO. En el transcurso del acto, Bermúdez quiso destacar que el incremento presupuestario ha sido posible gracias a los recortes que se han aplicado en otros departamento de la DGA y a la mayor aportación por parte del Gobierno central.
Un respaldo que ha permitido impulsar unas actuaciones que aún no se habían implementado en la comunidad (ver columna) y que se acordaron en el marco del AESPA. Para este nuevo paquete de medidas, que beneficiará a 12.050 aragoneses, se ha destinado una partida adicional de 7,1 millones, que se suman a los 56,7 y 42,1 millones presupuestados por el Inaem para programas de formación y empleo y que en el 2009 llegaron a 47.000 y 21.000 personas, respectivamente.
COMPARATIVA En total serán 106,1 millones para desarrollar políticas activas de empleo a lo largo del 2010, frente a los 92 millones del pasado año, de los que 52 se destinaron a programas de formación y 40 para actuaciones relacionadas con el empleo.
Según explicó Bermúdez, gracias al plan de formación se pondrán en marcha diferentes iniciativas como escuelas taller o cursos para empleados, parados y personas con dificultades de inserción. El programa de empleo, por su parte, incidirá en las ayudas a los empleadores (tanto fiscales como a la contratación), en los convenios con ayuntamientos para realizar obras que generen empleos o en las subvenciones para los autónomos.
En general, el nuevo plan de empleo ha generado buenas sensaciones entre los agentes sociales, que ayer mostraron su "satisfacción". "A pesar de las limitaciones hemos conseguido desarrollar medidas realmente útiles", resumió José María García.
Carvajal fue el único que se mostró más reivindicativo al reconocer que hubiera querido un plan "más ambicioso". "Entendemos que el presupuesto no da para todo, pero nos hubiera gustado implantar un nuevo tipo de contrato que vinculara la formación a un puesto indefinido", lamentó Carvajal. "Igual es mejor centrarse en medidas efectivas y dejar otras subvenciones que no crean tanto empleo", dijo.
La ecuación era tan sencilla que no podía resolverse de otra forma: a (muchos) más parados, más dinero para políticas destinadas a reactivar el mercado de trabajo. El Gobierno de Aragón, en colaboración con los sindicatos y las organizaciones empresariales, va a impulsar este año planes de formación y empleo por valor de 106 millones de euros, casi catorce más que en el 2009. El objetivo, según dijo la directora gerente del Inaem, Ana Bermúdez, es "paliar" las consecuencias de la crisis y "apoyar" a trabajadores y compañías para conseguir un capital humano "más cualificado" y un tejido empresarial "más competitivo". Las diferentes actuaciones que se pondrán en marcha podrían beneficiar en su conjunto a más de 80.000 aragoneses.
Con todo, la clave ahora es saber cuántos empleos lograrán crear estos programas, algo "muy difícil de cuantificar", según reconoció la propia Bermúdez. No obstante, desde el Inaem estiman que el 50% de los "alumnos" que realizan algún curso de formación encuentra empleo. Una cifra nada despreciable teniendo en cuenta que en 2009 pasaron por las aulas 47.000 personas (aunque no todas estaban en paro).
La directora del Inaem, que presentó el plan de empleo en la sede del Ejecutivo autonómico, estuvo acompañada por José María García, de la CREA, Rafael Zapatero, de Cepyme Aragón, Raúl Machín, de UGT, y Antonio Carvajal, de CCOO. En el transcurso del acto, Bermúdez quiso destacar que el incremento presupuestario ha sido posible gracias a los recortes que se han aplicado en otros departamento de la DGA y a la mayor aportación por parte del Gobierno central.
Un respaldo que ha permitido impulsar unas actuaciones que aún no se habían implementado en la comunidad (ver columna) y que se acordaron en el marco del AESPA. Para este nuevo paquete de medidas, que beneficiará a 12.050 aragoneses, se ha destinado una partida adicional de 7,1 millones, que se suman a los 56,7 y 42,1 millones presupuestados por el Inaem para programas de formación y empleo y que en el 2009 llegaron a 47.000 y 21.000 personas, respectivamente.
COMPARATIVA En total serán 106,1 millones para desarrollar políticas activas de empleo a lo largo del 2010, frente a los 92 millones del pasado año, de los que 52 se destinaron a programas de formación y 40 para actuaciones relacionadas con el empleo.
Según explicó Bermúdez, gracias al plan de formación se pondrán en marcha diferentes iniciativas como escuelas taller o cursos para empleados, parados y personas con dificultades de inserción. El programa de empleo, por su parte, incidirá en las ayudas a los empleadores (tanto fiscales como a la contratación), en los convenios con ayuntamientos para realizar obras que generen empleos o en las subvenciones para los autónomos.
En general, el nuevo plan de empleo ha generado buenas sensaciones entre los agentes sociales, que ayer mostraron su "satisfacción". "A pesar de las limitaciones hemos conseguido desarrollar medidas realmente útiles", resumió José María García.
Carvajal fue el único que se mostró más reivindicativo al reconocer que hubiera querido un plan "más ambicioso". "Entendemos que el presupuesto no da para todo, pero nos hubiera gustado implantar un nuevo tipo de contrato que vinculara la formación a un puesto indefinido", lamentó Carvajal. "Igual es mejor centrarse en medidas efectivas y dejar otras subvenciones que no crean tanto empleo", dijo.
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