27/06/2011
Los problemas de liquidez continúan afectando a las empresas aragonesas.
En los tres primeros meses del año, 51 compañías han presentado una solicitud de concurso de acreedores por no poder afrontar los pagos. El año pasado, 195 tuvieron que recurrir a esta fórmula para garantizar su supervivencia. La mayoría son pymes que tienen muchas dificultades para acceder ala financiación. En otros casos, son proveedores de las Administraciones que no cobran sus facturas. La mayoría son sociedades de responsabilidad limitada y que se dedican a la construcción o el comercio. Son compañías que tienen menos de 10 trabajadores y que no llegan a facturar dos millones de euros al año.
Desde la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa Aragonesa (CEPYME), recomiendan tener una buena previsión contable y, en el caso de no poder afrontar las deudas, intentar renegociarlas antes de acudir a un concurso de acreedores. El responsable de la asesoría jurídica de CEPYME, Eugenio García, asegura que en este contexto de crisis "son muy pocas las empresas que remontan este proceso y consiguen evitar la liquidación". García concluye que los concursos de acreedores "no van a descender a corto plazo", ya que aún existen "problemas de morosidad, falta de liquidez y dificultad de las empresas para acceder al crédito".
Muchas pymes están asfixiadas por los retrasos en los pagos de las instituciones. Según un informe de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, el Gobierno aragonés debe 452,5 millones de euros a los proveedores, cifra que la sitúa en el puesto 11 de entre todas las Comunidades Autónomas. En total, las Administraciones públicas adeudan 13.300 millones a los autónomos.
Por otro lado, representantes de los jóvenes empresarios de toda España se han reunido en Zaragoza para analizar las dificultades de los emprendedores. En época de crisis, creen que buena parte del éxito pasa por la apuesta por la internacionalización, la mejora de la productividad y la búsqueda de financiación. En España, hay más de 18.500 jóvenes emprendedores. Este colectivo pide pasos adelante en la reforma laboral y en la negociación colectiva.
En los tres primeros meses del año, 51 compañías han presentado una solicitud de concurso de acreedores por no poder afrontar los pagos. El año pasado, 195 tuvieron que recurrir a esta fórmula para garantizar su supervivencia. La mayoría son pymes que tienen muchas dificultades para acceder ala financiación. En otros casos, son proveedores de las Administraciones que no cobran sus facturas. La mayoría son sociedades de responsabilidad limitada y que se dedican a la construcción o el comercio. Son compañías que tienen menos de 10 trabajadores y que no llegan a facturar dos millones de euros al año.
Desde la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa Aragonesa (CEPYME), recomiendan tener una buena previsión contable y, en el caso de no poder afrontar las deudas, intentar renegociarlas antes de acudir a un concurso de acreedores. El responsable de la asesoría jurídica de CEPYME, Eugenio García, asegura que en este contexto de crisis "son muy pocas las empresas que remontan este proceso y consiguen evitar la liquidación". García concluye que los concursos de acreedores "no van a descender a corto plazo", ya que aún existen "problemas de morosidad, falta de liquidez y dificultad de las empresas para acceder al crédito".
Muchas pymes están asfixiadas por los retrasos en los pagos de las instituciones. Según un informe de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, el Gobierno aragonés debe 452,5 millones de euros a los proveedores, cifra que la sitúa en el puesto 11 de entre todas las Comunidades Autónomas. En total, las Administraciones públicas adeudan 13.300 millones a los autónomos.
Por otro lado, representantes de los jóvenes empresarios de toda España se han reunido en Zaragoza para analizar las dificultades de los emprendedores. En época de crisis, creen que buena parte del éxito pasa por la apuesta por la internacionalización, la mejora de la productividad y la búsqueda de financiación. En España, hay más de 18.500 jóvenes emprendedores. Este colectivo pide pasos adelante en la reforma laboral y en la negociación colectiva.
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